que dice cosas
que no siempre entiendo
como que no fueran para mi;
sin embargo al mirarme
vuelas, vuelves,
reiteras tu canto.
Yo inconsciente
sigo esperando
a que te poses en mi rama,
que cantes adentro,
más debajo de mi alma.
En la raíz secreta de estas flores.
a caso entre los matorrales de Corinto
o por las alturas de los Cuchumatanes;
por el equilibrio del niño de pecho,
o por el vértigo de la edad de los abuelos?
Yo te estoy esperando
en la puerta del amanecer.
Con los cánticos sálmicos del templo sagrado,
para que derramen las nubes la victoria
y germine de la tierra la justicia.
Yo anhelo con nervio de fuego
que todos los clamores voceen en una
a la orden de Amós
mientras en tu secreto silente
me tejes por dentro
otra vez como en el vientre de mi madre.
Para que cuando por fin vengas
me eleves en tu canto,
más allá de las alturas de tu mirar,
al otro lado de mi súplica,
me traigas en la suavidad de tu camino
a tocar por fin tus secretos
como tocas los míos en mi amor distraído.
Por: Guillermo Delgado
Fotos: jgda
3 Comentarios
El canto si cual ave se posa en la rama y fecunda, "la semilla," el alma secreta de la flor o el simiente en el vientre de la madre que germina al son de salmo y lluvia en las puertas del amanecer... Amen.
Perdona que trasquile la cosecha y que se me caigan de mis manos llenas estos frutos exquisitos.
Leonel
Simple y sencillamente... como no creer en la gracia divina, dichoso aquel que ilumina su vida de esta... su pagìna es un suspiro, mi antera admiraciòn, fray Guillermo que el señor le bendiga¡
Muy bonita inspiración Fray Guillermo lo admiro mucho su poema dice exactamente la realidad
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